Puerto Rico llama la atención por sus playas caribeñas, pero también por la multiculturalidad de sus ciudades, debido a las influencias españolas y americanas. Desde la capital, San Juan, hasta el conocido bosque de El Yunque puedes disfrutar de multitud de experiencias.
En San Juan destaca el barrio Viejo, un distrito de arquitectura colonial construido en 1943 al llegar los españoles. Sus calles estrechas y empedradas son un laberinto en el que perderse hasta llegar al fuerte El Morro.
Las playas más tranquilas y, para muchos, las mejores se encuentran tanto en la isla de Vieques como en la isla de Culebra, esta última, más turística. Entre todas, destaca la playa Flamenco, elegida mejor playa del mundo en varias clasificaciones.
En muchos lugares te puedes lanzar en una tirolina, pero solo en Puerto Rico puedes hacerlo desde la más grande del mundo. El Toro Verde Adventure Park, de Orocovis, constituye una grata experiencia para los amantes de la aventura.
Apenas a una hora de San Juan por carretera se encuentra el bosque nacional El Yunque, el único bosque tropical de la isla. Hay muchos senderos en la zona norte, a la que se accede desde Luquillo, aunque la zona más salvaje y frondosa es la sur.
Si te gustan las pinturas callejeras, debes visitar la ciudad de Arecibo, ya que esta urbe se ha convertido en un museo al aire libre gracias a los cientos de pinturas que hay en paredes, fachadas y viviendas.
La mejor época para viajar a Puerto Rico se sitúa entre diciembre y abril, cuando las temperaturas son cálidas y no suele llover. Mayo y noviembre son meses de transición, mientras que de junio a octubre es temporada de lluvias y huracanes.
Puerto Rico pertenece a los Estados Unidos, por lo que exige los mismos requisitos de entrada. De esta forma, los ciudadanos europeos disponen de una exención de visado durante treinta días para viajar como turistas.
El aeropuerto Luis Muñoz Marín de San Juan, que tiene conexión directa con Madrid, es la principal vía de llegada de turistas. Otra buena alternativa es hacer escala en Miami.
De Barcelona, salen cruceros rumbo a San Juan, en un trayecto de dieciséis días y que hace paradas en las Islas Vírgenes Británicas.
Puerto Rico es uno de los paraísos de los resorts situados junto al mar, sobre todo en la costa cercana a San Juan. Puedes alojarte en régimen de todo incluido, aunque no es la opción más habitual en el país. Si quieres abaratar el viaje, puedes alojarte en Bed and Breakfast (cama y desayuno) o acampar en zonas permitidas.
Puerto Rico, principalmente, tiene transporte público en la ciudad de San Juan, donde funcionan de forma eficiente los autobuses públicos, en un horario de 06:00 a 21:00 y con una tarifa de unos 5 $ (unos 4,5 €) por todo el día. Además, también existe un tren que conecta toda la zona metropolitana de la capital. En el resto de las ciudades funcionan solo los buses, con tarifas de, aproximadamente, 1 $ (unos 0,90 €) por viaje.
En Puerto Rico existen los llamados Públicos, minibuses compartidos que recorren todo el país a un precio económico.
Alquilar coche es relativamente barato en la ciudad de San Juan, ya que el precio por día ronda los 30 $ (unos 27 €), por lo que representa una buena manera de moverse por la isla.
Las dimensiones de la isla no invitan a coger aviones locales, más allá de los que conectan con las islas de Culebra y Vieques. Por ejemplo, un vuelo entre San Juan y el aeropuerto de Culebra tiene un precio de unos 100 $ (90 €, más o menos).
Económico
2 adultos, 2 maletas
$54/día
SUV compacto
4 adultos, 2 maletas
$61/día
El coste de la vida en Puerto Rico es similar al de Europa, algo que se entiende por el uso del dólar estadounidense. Por ello, comer en un restaurante de rango medio cuesta unos 30 $ (alrededor de 25 €) y una excursión a bucear, unos 200 $ (180 €, más o menos). Si bien en la mayoría de los restaurantes y centros comerciales se puede pagar con tarjeta, en las zonas populares debe pagarse en efectivo.